domingo, 30 de abril de 2017
sábado, 29 de abril de 2017
Nara Leão - Estrada do sol
Y aparte de la dulce Nara Leão, tenemos a Elis Regina y a Gal Costa, cada una por su lado: "Elis Regina + Gal Costa - Estrada do sol"
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viernes, 28 de abril de 2017
The King Singers - Otro tal misacantano
The King Singers - Otro tal misacantano - Anónimo (Cancionero de Palacio)
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Canciones en español,
Música renacentista
"–Esa guirnalda de rosas, hija, ¿quién te la endonara?"
–Esa guirnalda de rosas,
hija, ¿quién te la endonara?
–Donómela un caballero
que por mi puerta pasara;
tomárame por la mano,
a su casa me llevara,
en un portalico escuro
conmigo se deleitara.
Echóme en cama de rosas
en la cual nunca fui echada,
hízome, no sé qué hizo,
que d’él vengo enamorada;
traigo, madre, la camisa
de sangre toda manchada.
–¡Oh sobresalto rabioso!,
¡que mi ánima es turbada!
Si dices verdad, mi hija,
tu honra no vale nada,
que la gente es maldiciente,
luego serás deshonrada.
–Calledes, madre, calledes,
calléis, madre muy amada,
que más vale un buen amigo
que no ser mal maridada.
Dame el buen amigo, madre,
buen mantillo y buena saya,
la que cobra mal marido
vive malaventurada.
–Hija, pues queréis así,
tú contenta, yo pagada.
(Recuperación del patrimonio literario oral español)
(Fotografía de StellaDeLMattino - Flickr)
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Anónimo,
Literatura castellana
jueves, 27 de abril de 2017
Ella Fitzgerald & Louis Armstrong - Moonlight in Vermont
Ella Fitzgerald (Newport News, 25 de abril de 1917-Beverly Hills, 15 de junio de 1996)
MOONLIGHT IN VERMONT
Pennies in a stream
Falling leaves of a sycamore
Moonlight in Vermont
Icey finger waves
Ski trails on a mountain side
Snowlight in Vermont
Telegraph cables, they sing down the highway
And travel each bend in the road
People who meet, in this romantic setting
Are so hypnotized by the lovely
Evening summer breeze
Warbling of a meadowlark
Moonlight in Vermont
Telegraph cables, they sing down the highway
And travel each bend in the road
People who meet, in this romantic setting
Are so hypnotized by the lovely
Evening summer breeze
Warbling of a meadowlark
Moonlight in Vermont
You and I and moonlight in Vermont
Moonlight in Vermont
Compuesta por John M. Blackburn y Karl Suessdorf
MOONLIGHT IN VERMONT
Pennies in a stream
Falling leaves of a sycamore
Moonlight in Vermont
Icey finger waves
Ski trails on a mountain side
Snowlight in Vermont
Telegraph cables, they sing down the highway
And travel each bend in the road
People who meet, in this romantic setting
Are so hypnotized by the lovely
Evening summer breeze
Warbling of a meadowlark
Moonlight in Vermont
Telegraph cables, they sing down the highway
And travel each bend in the road
People who meet, in this romantic setting
Are so hypnotized by the lovely
Evening summer breeze
Warbling of a meadowlark
Moonlight in Vermont
You and I and moonlight in Vermont
Moonlight in Vermont
Compuesta por John M. Blackburn y Karl Suessdorf
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Ella Fitzgerald - All Over Nothing At All
Canciones como ésta y la anterior, Cryin' Mood, no habían sido publicadas aquí, sino de los años cincuenta y sesenta, y más. Tiempo era... Una jovencita Ella.
Ella Fitzgerald (Newport News, 25 de abril de 1917-Beverly Hills, 15 de junio de 1996)
Ella Fitzgerald (Newport News, 25 de abril de 1917-Beverly Hills, 15 de junio de 1996)
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miércoles, 26 de abril de 2017
Ella Fitzgerald - Cryin' Mood
Ella Fitzgerald (Newport News, 25 de abril de 1917-Beverly Hills, 15 de junio de 1996)
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Ella Fitzgerald - 100 años
Ella Fitzgerald, 1940. Carl Van Vechten (*)
Ella Fitzgerald nació el 25 de abril de 1917... La recordamos hoy con un par de canciones: la primera, una de los hermanos Gershwin... Claro que pueden caer algunas más. Cien años son cien años.
Ella Fitzgerald - Official Site
ISN'T A PITY
Why did I wander, here and there and yonder,
Wasting precious time for no reason or rhyme?
Isn't it a pity! Isn't it a crime!
My journey is ended, everything is splendid;
Meeting you today has given me a wonderful idea -
Here I stay!
It's a funny thing;
I look at you, I get a thrill I never knew,
Isn't it a pity we never met before!
Here we are at last,
It's like a dream, the two of us, a perfect team,
Isn't it a pity we never met before!
Imagine all the lonely years we've wasted,
You with the neighbours, I at silly labours!
What joys untasted,
You readin Heine, me somewhere in China!
Let's forget the past, let's both agree
That I'm for you and you're for me,
And it's such a pity we never, never met before!
Imagine all the lonely years we've wasted,
Fishing for salmon, losing at backgammon!
What joys untasted,
My nights were sour, spent with Schopenhauer!
Let's forget the past, let's both agree
That I'm for you and you're for me,
And it's such a pity we never, never met before!
Ella Fitzgerald - Official Site
ISN'T A PITY
Why did I wander, here and there and yonder,
Wasting precious time for no reason or rhyme?
Isn't it a pity! Isn't it a crime!
My journey is ended, everything is splendid;
Meeting you today has given me a wonderful idea -
Here I stay!
It's a funny thing;
I look at you, I get a thrill I never knew,
Isn't it a pity we never met before!
Here we are at last,
It's like a dream, the two of us, a perfect team,
Isn't it a pity we never met before!
Imagine all the lonely years we've wasted,
You with the neighbours, I at silly labours!
What joys untasted,
You readin Heine, me somewhere in China!
Let's forget the past, let's both agree
That I'm for you and you're for me,
And it's such a pity we never, never met before!
Imagine all the lonely years we've wasted,
Fishing for salmon, losing at backgammon!
What joys untasted,
My nights were sour, spent with Schopenhauer!
Let's forget the past, let's both agree
That I'm for you and you're for me,
And it's such a pity we never, never met before!
Publicado en 1959
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Una foto de Gustavo Minas
Estamos en Río de Janeiro. La fotografía es de Gustavo Minas, aunque también puede leerse Gustavo Gomes en su página de Flickr.
Su página, gustavominas.com
Gustavo Minas en Vivo
Su página, gustavominas.com
Gustavo Minas en Vivo
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Fotos a salto de mata,
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Agustín de Foxá - Melancolía de desaparecer
MELANCOLÍA DE DESAPARECER
Y pensar que después que yo me muera
aún surgirán mañanas luminosas,
que bajo un cielo azul, la primavera,
indiferente a mi mansión postrera,
encarnará en la seda de las rosas.
Y pensar que, desnuda, azul, lasciva,
sobre mis huesos danzará la vida,
y que habrá nuevos cielos de escarlata,
bañados por la luz del sol poniente
y noches llenas de esa luz de plata,
que inundaban mi vieja serenata,
cuando aún cantaba Dios, bajo mi frente.
Y pensar que no puedo en mi egoísmo
llevarme al sol ni al cielo en mi mortaja;
que he de marchar, yo sólo hacia el abismo,
y que la luna brillará lo mismo
y ya no la veré desde mi caja.
Agustín de Foxá
(Leído aquí)
"Poema del tedio del mundo actual"
"Grecia"
(Fotografía de Akteon - Flickr)
Y pensar que después que yo me muera
aún surgirán mañanas luminosas,
que bajo un cielo azul, la primavera,
indiferente a mi mansión postrera,
encarnará en la seda de las rosas.
Y pensar que, desnuda, azul, lasciva,
sobre mis huesos danzará la vida,
y que habrá nuevos cielos de escarlata,
bañados por la luz del sol poniente
y noches llenas de esa luz de plata,
que inundaban mi vieja serenata,
cuando aún cantaba Dios, bajo mi frente.
Y pensar que no puedo en mi egoísmo
llevarme al sol ni al cielo en mi mortaja;
que he de marchar, yo sólo hacia el abismo,
y que la luna brillará lo mismo
y ya no la veré desde mi caja.
Agustín de Foxá
(Leído aquí)
"Poema del tedio del mundo actual"
"Grecia"
(Fotografía de Akteon - Flickr)
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Verso
martes, 25 de abril de 2017
José Afonso - Enquanto há força
"Mientras hay fuerza", Enquanto há força, es la primera canción de un álbum de 1978, al que da título. Habían pasado tan sólo cuatro años desde aquel 25 de abril. La voz de Zeca Afonso...
ENQUANTO HÁ FORÇA
Enquanto há força
No braço que vinga
Que venham ventos
Virar-nos as quilhas
Seremos muitos
Seremos alguém
Cantai rapazes
Dançai raparigas
E vós altivas
Cantai também
Levanta o braço
Faz dele uma barra
Que venha a brisa
Lavar-nos a cara
Seremos muitos
Seremos alguém
Cantai rapazes
Dançai raparigas
E vós altivas
Cantai também
ENQUANTO HÁ FORÇA
Enquanto há força
No braço que vinga
Que venham ventos
Virar-nos as quilhas
Seremos muitos
Seremos alguém
Cantai rapazes
Dançai raparigas
E vós altivas
Cantai também
Levanta o braço
Faz dele uma barra
Que venha a brisa
Lavar-nos a cara
Seremos muitos
Seremos alguém
Cantai rapazes
Dançai raparigas
E vós altivas
Cantai também
Puede escucharse el disco aquí
Alfarrábio . Universidade do Minho (todas las letras del disco)
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Música portuguesa
"El entierro del fascismo" (Cambio 16, 11-15 de mayo de 1975)
Por ahí andaba guardada la portada de este número de Cambio 16. La revolución de los Claveles reciente, reciente, y nosotros todavía en la España en blanco y negro. Historia. "Lo que pudo haber sido y no fue".
lunes, 24 de abril de 2017
Un pilar en Tesalónica
Pilier décoré Théssalonique / Villa Incantada fin du IIème siècle Ap J.-C. début du IIIème siècle.
(Fotografía de ackteon - Flickr)
Fernando Pinto do Amaral - "Schubert, D.714"
SCHUBERT, D. 714
Demorámos um ano a aprender
alguns gestos de assombro e maravilha,
a voz da adolescência que desperta
silenciosa, depois do degelo,
e nos derrete a neve que envolvia
o próprio coração, agora aqui
à flor das nossas bocas.
Afogado na tua presença,
repito cada vez com menos estranheza
uma palavra: nós.
A sua vibração é um relâmpago
no crepúsculo da sala
e volto a encontrar a flor azul
que brota dos teus olhos, sempre em busca
de um sobressalto iluminado
quando dizemos: "toma, este é o meu corpo,
revelado por ti."
Sei hoje como é perder a inocência
e conservá-la ainda num recanto
desta sala de espelhos onde vive
a luz da tua imagem entre vozes
que celebram em coro o espírito das águas,
essa primeira esperança confiada
por Deus às nossas vidas.
Demorámos um ano a aprender
alguns gestos de assombro e maravilha,
a voz da adolescência que desperta
silenciosa, depois do degelo,
e nos derrete a neve que envolvia
o próprio coração, agora aqui
à flor das nossas bocas.
Afogado na tua presença,
repito cada vez com menos estranheza
uma palavra: nós.
A sua vibração é um relâmpago
no crepúsculo da sala
e volto a encontrar a flor azul
que brota dos teus olhos, sempre em busca
de um sobressalto iluminado
quando dizemos: "toma, este é o meu corpo,
revelado por ti."
Sei hoje como é perder a inocência
e conservá-la ainda num recanto
desta sala de espelhos onde vive
a luz da tua imagem entre vozes
que celebram em coro o espírito das águas,
essa primeira esperança confiada
por Deus às nossas vidas.
Fernando Pinto do Amaral
Franz Schubert - Gesang der Geister über den Wassern, D. 714
Recorded in the course of the styriarte 1997, June 21st & 22nd
domingo, 23 de abril de 2017
Archie Shepp Quartet - Here's That Rainy Day
Un poco de agua para refrescar... Hoy Archie Shepp. Para otro día, Bill Evans.
Album - True Ballads
Archie Shepp - saxo tenor
John Hicks - piano
George Mraz - bajo
Idris Muhammad - batería
Album - True Ballads
Archie Shepp - saxo tenor
John Hicks - piano
George Mraz - bajo
Idris Muhammad - batería
Jorge Guillén - El hondo sueño
EL HONDO SUEÑO
Este soñar a solas… ¡Si tu vida
De pronto amaneciese ante mi espera!
¿Por dónde voy cayendo? Primavera,
Mientras, en torno mío dilapida
Su olor y se me escapa en la caída.
¡Tan solitariamente se acelera
-Y está la noche ahí, variando fuera-
La gravedad de un ansia desvalida!
Pero tanto sofoco en el vacío
Cesará. Gozaré de apariciones
Que atajarán el vergonzante empeño
De henchir tu ausencia con mi desvarío.
¡Realidad, realidad, no me abandones
Para soñar mejor el hondo sueño!
Jorge Guillén
Este soñar a solas… ¡Si tu vida
De pronto amaneciese ante mi espera!
¿Por dónde voy cayendo? Primavera,
Mientras, en torno mío dilapida
Su olor y se me escapa en la caída.
¡Tan solitariamente se acelera
-Y está la noche ahí, variando fuera-
La gravedad de un ansia desvalida!
Pero tanto sofoco en el vacío
Cesará. Gozaré de apariciones
Que atajarán el vergonzante empeño
De henchir tu ausencia con mi desvarío.
¡Realidad, realidad, no me abandones
Para soñar mejor el hondo sueño!
Jorge Guillén
(Fotografía de rainscience - Flickr)
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Verso
Lázaro Covadlo - Nunca apagaba la luz
NUNCA APAGABA LA LUZ
Noche tras noche me resistía a mirar en dirección a la ventana. Nunca apagaba la luz, y detrás de aquel vidrio la oscuridad exterior era un telón negro. Cerraba los párpados e intentaba dormir, y en tanto no llegaba el sueño yo rezaba. Le suplicaba a Dios no estar despierto cuando llegara el momento.
¿Cómo me costaba sustraerme a la vigilia y encontrar refugio en la inconsciencia del sueño más profundo! Muchas noches de invierno sentía por allá afuera, girando alrededor de la casa, la queja del viento. En ocasiones me daba por imaginar que el viento penaba por su propio desamparo, por no serle permitida la entrada a los hogares. Daba por seguro que de noche, cualquier ser, objeto o elemento que estuviese a la intemperie debía de vivir atormentado: de noche el mundo externo era un terrible abismo. En cambio, ¡era tan cálido mi cuarto! En las paredes, de color azul celeste, mamá había pintado conejitos, jirafas y elefantes. El cielo raso también era de color azul, aunque era un azul más luminoso. Paseaba mis ojos por aquellas superficies amables y me empeñaba en apartarlos de la negrura de la ventana desprovista de cortinas. Me abrazaba a mi osito tibio, peludo y gordinflón, y entonces él y yo nos sumergíamos en el amigable mundo que hay debajo de las mantas. Pero al cabo de un tiempo sacaba la cabeza y no podía evitar que mis ojos se fijaran en la ventana. Entonces veía ese rostro que cada noche asomaba desde un ángulo y se ponía a espiar. Era una visión fugaz, pues el mirón, al sentirse descubierto, rápidamente volvía a esconderse entre las sombras del abismo. Sin embargo, aun cuando no alcanzaba a descubrir su identidad, no podía dejar de ver el brillo ansioso de sus ojos acechantes. Algunas veces también creí ver su brazo, y su puño sosteniendo el relámpago de una hoja de metal.
Las primeras noches grité y reclamé la presencia de mi madre, pero dejé de hacerlo al cabo de muchas reprimendas. Ella amenazó con apagar la luz si insistía en inventar historias; eso fue lo que dijo.
Si alguna vez hubo algo o alguien allí afuera yo lo esperé en vano, pues pasaron los años y nunca vino a por mí. Terminé convenciéndome de que lo que había creído ver no existía fuera de mi imaginación. Después me hice adulto y enfilé por los carriles trazados para nuestra especie: me casé y tuve un hijo. Mi hijo también empezó a ver cada noche el rostro del espía tras los cristales de su ventana.
Cierto atardecer salí de casa y quedé a la espera. El puñal que llevaba conmigo daría cuenta de cualquiera que se dedicara a asustar a mi niño. Pasaron las horas y al final me asomé a la ventana del cuarto iluminado. Era enternecedor ver a mi hijo abrazado a su osito de peluche. De pronto sus ojos se encontraron con los míos, y antes de que pudiera esconderme, en los suyos alcancé a descubrir el terror.
Lázaro Covadlo
Cuento completo. Leído en el blog Las cosas que hemos visto
(Fotografía de Gary Karlsson - Flickr)
Noche tras noche me resistía a mirar en dirección a la ventana. Nunca apagaba la luz, y detrás de aquel vidrio la oscuridad exterior era un telón negro. Cerraba los párpados e intentaba dormir, y en tanto no llegaba el sueño yo rezaba. Le suplicaba a Dios no estar despierto cuando llegara el momento.
¿Cómo me costaba sustraerme a la vigilia y encontrar refugio en la inconsciencia del sueño más profundo! Muchas noches de invierno sentía por allá afuera, girando alrededor de la casa, la queja del viento. En ocasiones me daba por imaginar que el viento penaba por su propio desamparo, por no serle permitida la entrada a los hogares. Daba por seguro que de noche, cualquier ser, objeto o elemento que estuviese a la intemperie debía de vivir atormentado: de noche el mundo externo era un terrible abismo. En cambio, ¡era tan cálido mi cuarto! En las paredes, de color azul celeste, mamá había pintado conejitos, jirafas y elefantes. El cielo raso también era de color azul, aunque era un azul más luminoso. Paseaba mis ojos por aquellas superficies amables y me empeñaba en apartarlos de la negrura de la ventana desprovista de cortinas. Me abrazaba a mi osito tibio, peludo y gordinflón, y entonces él y yo nos sumergíamos en el amigable mundo que hay debajo de las mantas. Pero al cabo de un tiempo sacaba la cabeza y no podía evitar que mis ojos se fijaran en la ventana. Entonces veía ese rostro que cada noche asomaba desde un ángulo y se ponía a espiar. Era una visión fugaz, pues el mirón, al sentirse descubierto, rápidamente volvía a esconderse entre las sombras del abismo. Sin embargo, aun cuando no alcanzaba a descubrir su identidad, no podía dejar de ver el brillo ansioso de sus ojos acechantes. Algunas veces también creí ver su brazo, y su puño sosteniendo el relámpago de una hoja de metal.
Las primeras noches grité y reclamé la presencia de mi madre, pero dejé de hacerlo al cabo de muchas reprimendas. Ella amenazó con apagar la luz si insistía en inventar historias; eso fue lo que dijo.
Si alguna vez hubo algo o alguien allí afuera yo lo esperé en vano, pues pasaron los años y nunca vino a por mí. Terminé convenciéndome de que lo que había creído ver no existía fuera de mi imaginación. Después me hice adulto y enfilé por los carriles trazados para nuestra especie: me casé y tuve un hijo. Mi hijo también empezó a ver cada noche el rostro del espía tras los cristales de su ventana.
Cierto atardecer salí de casa y quedé a la espera. El puñal que llevaba conmigo daría cuenta de cualquiera que se dedicara a asustar a mi niño. Pasaron las horas y al final me asomé a la ventana del cuarto iluminado. Era enternecedor ver a mi hijo abrazado a su osito de peluche. De pronto sus ojos se encontraron con los míos, y antes de que pudiera esconderme, en los suyos alcancé a descubrir el terror.
Lázaro Covadlo
Cuento completo. Leído en el blog Las cosas que hemos visto
(Fotografía de Gary Karlsson - Flickr)
sábado, 22 de abril de 2017
Marina Vlady
Marina Vlady en el rodaje de Campanadas a medianoche (Falstaff: Chimes at Midnight), dirigida por Orson Welles, foto de Nicolas Tikhomiroff, España, 1968 (*)
Autor del cartel: Peter Strausfeld
viernes, 21 de abril de 2017
Gloria Fuertes - Si el hambre es buena
SI EL HAMBRE ES BUENA
Si el hambre es buena,
un mendrugo de pan
¿para qué más?
Si la playa es buena
¿para qué navegar?
¿para qué más?
Si la amistad te llena,
¿para qué buscar?
¿para qué más?
Si el amor es AMOR,
loco es quien no dice
¿para qué más ?
Gloria Fuertes
Si el hambre es buena,
un mendrugo de pan
¿para qué más?
Si la playa es buena
¿para qué navegar?
¿para qué más?
Si la amistad te llena,
¿para qué buscar?
¿para qué más?
Si el amor es AMOR,
loco es quien no dice
¿para qué más ?
Gloria Fuertes
Gloria Fuertes: Madrid, 28 de julio de 1917 - 27 de noviembre de 1998
(Fotografía de Bianca Serena Turzi)
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jueves, 20 de abril de 2017
Ute Lemper - Chanson einer Dame im Schatten (Paul Celan)
Paul Celan y Gisele Celan-Lestrange
CHANSON EINER DAME IN SCHATTEN
Wenn die Schweigsame kommt und die Tulpen köpft:
Wer gewinnt?
Wer verliert?
Wer tritt an das Fenster?
Wer nennt ihren Namen zuerst?
Es ist einer, der trägt mein Haar.
Er trägts wie man Tote trägt auf den Händen.
Er trägts wie der Himmel mein Haar trug im Jahr, da ich liebte.
Er trägt es aus Eitelkeit so.
Der gewinnt.
Der verliert nicht.
Der tritt nicht ans Fenster.
Der nennt ihren Namen nicht.
Es ist einer, der hat meine Augen.
Er hat sie, seit Tore sich schliessen.
Er trägt sie am Finger wie Ringe.
Er trägt sie wie Scherben von Lust und Saphir:
er war schon mein Bruder im Herbst;
er zählt schon die Tage und Nächte.
Der gewinnt.
Der verliert nicht.
Der tritt nicht ans Fenster.
Der nennt ihren Namen zuletzt.
Es ist einer, der hat, was ich sagte.
Er trägts unterm Arm wie ein Bündel.
Er trägts wie die Uhr ihre schlechteste Stunde.
Er trägt es von Schwelle zu Schwelle, er wirft es nicht fort.
Der gewinnt nicht.
Der verliert.
Der tritt an das Fenster.
Der nennt ihren Namen zuerst.
Der wird mit den Tulpen geköpft.
Poema de Paul Celan, musicado por Michael Nyman e interpretado por Ute Lemper.
Wenn die Schweigsame kommt und die Tulpen köpft:
Wer gewinnt?
Wer verliert?
Wer tritt an das Fenster?
Wer nennt ihren Namen zuerst?
Es ist einer, der trägt mein Haar.
Er trägts wie man Tote trägt auf den Händen.
Er trägts wie der Himmel mein Haar trug im Jahr, da ich liebte.
Er trägt es aus Eitelkeit so.
Der gewinnt.
Der verliert nicht.
Der tritt nicht ans Fenster.
Der nennt ihren Namen nicht.
Es ist einer, der hat meine Augen.
Er hat sie, seit Tore sich schliessen.
Er trägt sie am Finger wie Ringe.
Er trägt sie wie Scherben von Lust und Saphir:
er war schon mein Bruder im Herbst;
er zählt schon die Tage und Nächte.
Der gewinnt.
Der verliert nicht.
Der tritt nicht ans Fenster.
Der nennt ihren Namen zuletzt.
Es ist einer, der hat, was ich sagte.
Er trägts unterm Arm wie ein Bündel.
Er trägts wie die Uhr ihre schlechteste Stunde.
Er trägt es von Schwelle zu Schwelle, er wirft es nicht fort.
Der gewinnt nicht.
Der verliert.
Der tritt an das Fenster.
Der nennt ihren Namen zuerst.
Der wird mit den Tulpen geköpft.
Poema de Paul Celan, musicado por Michael Nyman e interpretado por Ute Lemper.
Paul Celan - "¿Qué pasó? la piedra salió de la montaña"
Fotografía de Gisela Dischner
El 20 de abril de 1970, Paul Celan se arrojó a las aguas del Sena. Lo recordamos hoy con este poema y con otro, musicado por Michael Nyman e interpretado por Ute Lemper.
¿Qué pasó? la piedra salió de la montaña.
¿Quién despertó? Tú y yo.
Lengua, lengua. Constelación. Tierra cercana.
Más pobre. Abierta. En mi país nació.
¿Adónde iba esto? A lo no del todo sonado.
Con nosotros dos, con la piedra iba esto.
Corazón y corazón. Pareció demasiado pesado.
Volverse más pesado. Ser más ligero.
Paul Celan
De su libro La rosa de nadie [Die Niemandsrose], 1963. Edición utilizada: Obras completas (Paul Celan), traducción de José Luis Reina Palazón, Editorial Trotta, 3ª ed., 2002.
Was geschah? Der Stein trat aus dem Berge.
Wer erwachte? Du und ich.
Sprache, Sprache. Mit-Stern. Neben-Erde.
Ärmer. Offen. Heimatlich.
Wohin gings? Gen Unverklungen.
Mit dem Stein gings, mit uns zwein.
Herz und Herz. Zu schwer befunden.
Schwerer werden. Leichter sein
¿Qué pasó? la piedra salió de la montaña.
¿Quién despertó? Tú y yo.
Lengua, lengua. Constelación. Tierra cercana.
Más pobre. Abierta. En mi país nació.
¿Adónde iba esto? A lo no del todo sonado.
Con nosotros dos, con la piedra iba esto.
Corazón y corazón. Pareció demasiado pesado.
Volverse más pesado. Ser más ligero.
Paul Celan
De su libro La rosa de nadie [Die Niemandsrose], 1963. Edición utilizada: Obras completas (Paul Celan), traducción de José Luis Reina Palazón, Editorial Trotta, 3ª ed., 2002.
Was geschah? Der Stein trat aus dem Berge.
Wer erwachte? Du und ich.
Sprache, Sprache. Mit-Stern. Neben-Erde.
Ärmer. Offen. Heimatlich.
Wohin gings? Gen Unverklungen.
Mit dem Stein gings, mit uns zwein.
Herz und Herz. Zu schwer befunden.
Schwerer werden. Leichter sein
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Verso
miércoles, 19 de abril de 2017
Chantal Maillard - "Llevo acostada largo tiempo..."
Llevo acostada largo tiempo
en la orilla. Mis pechos
son colinas cubiertas de hoja seca.
Levanto la cabeza y me contemplo:
en mis muslos el vello a punto de ser vello,
me incorporo: la hierba a punto de ser hierba,
doy un paso y despierto al agua
a punto de ser agua,
se asusta un ave negra a punto de ser ave a punto
de ser negra...
Un resplandor me ciega:
el bosque me contempla, a punto de ser bosque,
a punto de ser tuya.
Chantal Maillard
De Hainuwele y otros poemas, Tusquets Editores. Nuevos textos sagrados, 1ª ed. 2009.
(Fotografía de Mauro Brancorsini - Flickr)
en la orilla. Mis pechos
son colinas cubiertas de hoja seca.
Levanto la cabeza y me contemplo:
en mis muslos el vello a punto de ser vello,
me incorporo: la hierba a punto de ser hierba,
doy un paso y despierto al agua
a punto de ser agua,
se asusta un ave negra a punto de ser ave a punto
de ser negra...
Un resplandor me ciega:
el bosque me contempla, a punto de ser bosque,
a punto de ser tuya.
Chantal Maillard
De Hainuwele y otros poemas, Tusquets Editores. Nuevos textos sagrados, 1ª ed. 2009.
(Fotografía de Mauro Brancorsini - Flickr)
martes, 18 de abril de 2017
Turíbio Santos - Choro da saudade (Agustín Barrios)
Agustín Barrios (1885-1944), también conocido como «Nitsuga Mangoré», fue un guitarrista clásico y compositor paraguayo de origen guaraní (Wikipedia), y compuso este Choro da saudade, que interpreta el guitarrista brasileño Turíbio Santos.
lunes, 17 de abril de 2017
Charles Simic - A medio camino
A MEDIO CAMINO
Tan pronto hube dejado A.
comencé a dudar de su existencia:
su gentío y sus calles ruidosas,
sus cárceles y sus cafés nocturnos.
era la hora de la cena. Las panaderías echaban el cierre:
en las repisas solo restos de harina blanca.
Los tenderos bajaban las persianas de hierro.
Una joven encantadora compraba el último melón.
Hasta la callejuela donde nací
se borra y desvanece… ¡Oh tejados!
Regimientos de camisas y sábanas
ondeando en el aire carmesí del anochecer…
*
B., adonde debo
llegar tarde o temprano,
no existe aún. Trabajan
sin descanso esperando mi llegada,
y ese día quedará lista:
ah, su gentío y sus calles ruidosas…
sin olvidar la escuela donde una vez
falsifiqué la firma de mi padre…
conscientes de que el día
en que me vaya
se disolverá para siempre
igual que A.
Charles Simic
(Austerities, 1982)
Poema en el Apéndice de El monstruo ama su laberinto. Cuadernos (Charles Simic). Traducción de Jordi Doce. Epílogo de Seamus Heaney. Vaso Roto, 2015 [1ª ed. en inglés, 2008]
(Fachadas de Belgrado, © Dragana Dimitrijević)
Tan pronto hube dejado A.
comencé a dudar de su existencia:
su gentío y sus calles ruidosas,
sus cárceles y sus cafés nocturnos.
era la hora de la cena. Las panaderías echaban el cierre:
en las repisas solo restos de harina blanca.
Los tenderos bajaban las persianas de hierro.
Una joven encantadora compraba el último melón.
Hasta la callejuela donde nací
se borra y desvanece… ¡Oh tejados!
Regimientos de camisas y sábanas
ondeando en el aire carmesí del anochecer…
*
B., adonde debo
llegar tarde o temprano,
no existe aún. Trabajan
sin descanso esperando mi llegada,
y ese día quedará lista:
ah, su gentío y sus calles ruidosas…
sin olvidar la escuela donde una vez
falsifiqué la firma de mi padre…
conscientes de que el día
en que me vaya
se disolverá para siempre
igual que A.
Charles Simic
(Austerities, 1982)
Poema en el Apéndice de El monstruo ama su laberinto. Cuadernos (Charles Simic). Traducción de Jordi Doce. Epílogo de Seamus Heaney. Vaso Roto, 2015 [1ª ed. en inglés, 2008]
(Fachadas de Belgrado, © Dragana Dimitrijević)
domingo, 16 de abril de 2017
Sarah Vaughan - April in Paris
Sarah Vaughan (singing)
Clifford Brown (trumpet)
Paul Quinichette (tenor sax)
Herbie Mann (flute)
Jimmy Jones (piano)
Roy Haynes (drums)
Joe Benjamin (bass)
sábado, 15 de abril de 2017
Gisela João + Amália Rodrigues - Quando eu era pequenina
Dos versiones en femenino de una canción tradicional de la Beira Baixa portuguesa: la de Gisela João y la de la gran Amália Rodrigues. Ya pudimos escucharla aquí en boca de Adriano Correia de Oliveira, en una versión algo más larga.
ERA AINDA PEQUENINA
Quando eu era pequenina,
acabada de nascer,
ainda mal abria os olhos
já eram para te ver.
ERA AINDA PEQUENINA
Quando eu era pequenina,
acabada de nascer,
ainda mal abria os olhos
já eram para te ver.
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viernes, 14 de abril de 2017
La mayestra Veneranda Manzano y el grupu escolar de Vidiago, Llanes. 1932
"La mayestra Veneranda Manzano y el grupu escolar de Vidiago, Llanes. 1932."
(Fotografía: Agneta von Aisaider - Flickr)
(Fotografía: Agneta von Aisaider - Flickr)
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Jesús Hilario Tundidor - Después que cae la sombra
DESPUÉS QUE CAE LA SOMBRA
Definitivamente he comprendido.
Todo el que bulle o hace ruido o grita
y gesticula y queda, unos instantes,
en la primera página de un mundo
inútil, locuaz mudez de muerte
representa. Paso fugaz, ira fugaz
es en el amplio conocer que olvida,
máscara, son, viento de una mañana.
Pero aquel que se sabe poderoso,
encauzado en el mar, llamado dentro
de una mortal entrega, de una lenta
labor, en la que vida o muerte sólo
es material de arquitectura o tránsito,
aquél que sufre y calla, acepta y toma
su herramienta, derrumba y edifica,
desnuda y viste, y multiplica el único
instante concedido siendo humilde
penetra victorioso, pues conoce
que su ámbito es la luz y allí es su triunfo.
Jesús Hilario Tundidor
En mi ejemplar del libro Tetraedro (Ámbito Literario, 1ª ed., 1978), al que pertenece este poema, el último verso aparece como "que su ámbito es lo oscuro, y allí triunfa." En intrernet aparece tal como lo doy arriba.
(Fotografía de Hélène Desplechin - Flickr)
Antonio Machado
Definitivamente he comprendido.
Todo el que bulle o hace ruido o grita
y gesticula y queda, unos instantes,
en la primera página de un mundo
inútil, locuaz mudez de muerte
representa. Paso fugaz, ira fugaz
es en el amplio conocer que olvida,
máscara, son, viento de una mañana.
Pero aquel que se sabe poderoso,
encauzado en el mar, llamado dentro
de una mortal entrega, de una lenta
labor, en la que vida o muerte sólo
es material de arquitectura o tránsito,
aquél que sufre y calla, acepta y toma
su herramienta, derrumba y edifica,
desnuda y viste, y multiplica el único
instante concedido siendo humilde
penetra victorioso, pues conoce
que su ámbito es la luz y allí es su triunfo.
Jesús Hilario Tundidor
En mi ejemplar del libro Tetraedro (Ámbito Literario, 1ª ed., 1978), al que pertenece este poema, el último verso aparece como "que su ámbito es lo oscuro, y allí triunfa." En intrernet aparece tal como lo doy arriba.
(Fotografía de Hélène Desplechin - Flickr)
jueves, 13 de abril de 2017
Tete Montoliu Trio - Theme For Ernie
Primero Tete Montoliu, y para acompañar, Coltrane, por un lado, y McCoy Tyner por otro.
"John Coltrane + McCoy Tyner - Theme for Ernie"
"John Coltrane + McCoy Tyner - Theme for Ernie"
miércoles, 12 de abril de 2017
León Felipe - Pie para el niño de Vallecas de Velázquez
PIE PARA EL NIÑO DE VALLECAS DE VELÁZQUEZ
Bacía, Yelmo… Halo….,
éste es el orden, Sancho.
De aquí no se va nadie.
Mientras esta cabeza rota
del Niño de Vallecas exista,
de aquí no se va nadie. Nadie.
Ni el místico ni el suicida.
Antes hay que deshacer este entuerto,
antes hay que resolver este enigma.
Y hay que resolverlo entre todos,
y hay que resolverlo sin cobardía,
sin huir
con unas alas de percalina
o haciendo un agujero
en la tarima.
De aquí no se va nadie. Nadie.
Ni el místico ni el suicida.
Y es inútil,
inútil toda huida
(ni por abajo
ni por arriba).
Se vuelve siempre. Siempre.
Hasta que un día (¡un buen día!)
el yelmo de Mambrino
–halo ya, no yelmo ni bacía–
se acomode a las sienes de Sancho
y a las tuyas y a las mías
como pintiparado,
como hecho a la medida.
Entonces nos iremos todos
por las bambalinas.
Tú, y yo, y Sancho, y el Niño de Vallecas,
y el místico, y el suicida.
León Felipe
Versos y oraciones del caminante, Libro II. Nueva York, 1929.
Leído en su Nueva antología rota, Finisterre Editores, México, 2ª edición. 1974
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martes, 11 de abril de 2017
Bill Evans - April in Paris
Tras Bill Evans en solitario, tenemos otras tres grabaciones: la de Ella Fitzgerald y la de Count Basie, y la de Coleman Hawkins, por si a alguien le apetece escucharlas.
lunes, 10 de abril de 2017
Agustín, Amancio y Chico - Afró, Tambú
93
Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé,
señora de las rosas y del amor,
del carro de palomas, del vientre azul,
ungida de sudor de mirra,
diosa del mar de risueño llanto,
Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé,
que de tus pechos asnos en celo van
paciendo, tú, que abrevas del corazón
de tu granada desgajada
larga la sed de los paraísos,
Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé,
escúchame, señora: a mi rezo tú
la blanca oreja torna: que vuelva: haz
que vuelva a casa y a mis brazos,
Maraliló la de mansos ojos.
Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé,
tú por tu mano tráela, tu mano pon
en su cintura, y tráemela sin voz,
como en un aura de canela
mástil en flor por el mar antiguo,
Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé.
Pero ¿por qué, señora, pero por qué
no pudo ser? ¿Por qué la dejaba huir
cuando temblaba entre estos brazos
presa y «No, no» me decía y «Deja»,
Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé?
Decía ella «Deja, que no»: que no
quería, que conmigo que no. Y olor
de pan manaba de su pelo.
¿Cómo se fue? ¿Para qué la oía,
Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé?
Pero tú, diosa, mándala aquí: que yo
no tenga que mentirle; porque ella es
hermana mía, y me decía
que era mentira el amor, y acaso,
Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé,
acaso es cierto, y yo no le sé decir
que sí, que amor, que cabe que haya paz
entre hembra y hombre. Y sin embargo
su corazón contra mí batía,
Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé:
las puntas de sus pechos mi corazón
herían, y decía «Que no», y yo
la oí, la oía. Pero, diosa,
tú engáñala para mí, tú, tráela,
Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé:
abrasa su dormida imaginación
de huellas mías: que arda como ardo yo;
que venga sola; que es hermana
mía y me muero de amor por ella,
Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé;
que dijo «No te quiero» y que sin querer
dejó en mi pecho roce de llaga en flor
y en mis rodillas; y no supe
desanudar la cintura aquella,
Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé.
Pero tú, diosa, hazla que venga a mí
por esa calle, a este rincón. ¿No ves
como me muero? En este banco
donde la tuve a mi par sentada,
Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé,
besando de sus nalgas la huella voy,
y husmeo como un perro por el vial
su rastro, y ya la luna hace
sombra de mí, y me muero de ella.
Agustín García Calvo
Canciones y soliloquios. Editorial Lucina. Zamora. Segunda edición, noviembre de 1982. (Primera edición, 1976, en La Gaya Ciencia)
Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé,
señora de las rosas y del amor,
del carro de palomas, del vientre azul,
ungida de sudor de mirra,
diosa del mar de risueño llanto,
Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé,
que de tus pechos asnos en celo van
paciendo, tú, que abrevas del corazón
de tu granada desgajada
larga la sed de los paraísos,
Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé,
escúchame, señora: a mi rezo tú
la blanca oreja torna: que vuelva: haz
que vuelva a casa y a mis brazos,
Maraliló la de mansos ojos.
Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé,
tú por tu mano tráela, tu mano pon
en su cintura, y tráemela sin voz,
como en un aura de canela
mástil en flor por el mar antiguo,
Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé.
Pero ¿por qué, señora, pero por qué
no pudo ser? ¿Por qué la dejaba huir
cuando temblaba entre estos brazos
presa y «No, no» me decía y «Deja»,
Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé?
Decía ella «Deja, que no»: que no
quería, que conmigo que no. Y olor
de pan manaba de su pelo.
¿Cómo se fue? ¿Para qué la oía,
Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé?
Pero tú, diosa, mándala aquí: que yo
no tenga que mentirle; porque ella es
hermana mía, y me decía
que era mentira el amor, y acaso,
Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé,
acaso es cierto, y yo no le sé decir
que sí, que amor, que cabe que haya paz
entre hembra y hombre. Y sin embargo
su corazón contra mí batía,
Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé:
las puntas de sus pechos mi corazón
herían, y decía «Que no», y yo
la oí, la oía. Pero, diosa,
tú engáñala para mí, tú, tráela,
Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé:
abrasa su dormida imaginación
de huellas mías: que arda como ardo yo;
que venga sola; que es hermana
mía y me muero de amor por ella,
Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé;
que dijo «No te quiero» y que sin querer
dejó en mi pecho roce de llaga en flor
y en mis rodillas; y no supe
desanudar la cintura aquella,
Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé.
Pero tú, diosa, hazla que venga a mí
por esa calle, a este rincón. ¿No ves
como me muero? En este banco
donde la tuve a mi par sentada,
Afró, Tambú,
Zadüíngara, Júmbara, Semelé,
besando de sus nalgas la huella voy,
y husmeo como un perro por el vial
su rastro, y ya la luna hace
sombra de mí, y me muero de ella.
Agustín García Calvo
Canciones y soliloquios. Editorial Lucina. Zamora. Segunda edición, noviembre de 1982. (Primera edición, 1976, en La Gaya Ciencia)
(Berenice, fotografía de Anahí Eleuterio - Flickr)
domingo, 9 de abril de 2017
Carmen McRae + John Coltrane - Invitation
INVITATION
You and your smile hold a strange invitation
Somehow it seems
We've shed our dreams but where
Time after time in a room full of strangers
Out of the blue, suddenly you are there
Wherever I go you're the glow of temptation,
Glancing my way in the grey of the dawn
And always your smile holds that strange invitation
Then you are gone
Where oh where have you gone
How long must I stay in a world of illusion
Be where you are so near yet so far, apart
Hoping you'll say with a warm invitation
Where have you been, darling come in
Into my heart
Carmen Mc Rae (1958)
(Letra de Rosemary Clooney y música de Bronislaw Kaper)
You and your smile hold a strange invitation
Somehow it seems
We've shed our dreams but where
Time after time in a room full of strangers
Out of the blue, suddenly you are there
Wherever I go you're the glow of temptation,
Glancing my way in the grey of the dawn
And always your smile holds that strange invitation
Then you are gone
Where oh where have you gone
How long must I stay in a world of illusion
Be where you are so near yet so far, apart
Hoping you'll say with a warm invitation
Where have you been, darling come in
Into my heart
Carmen Mc Rae (1958)
(Letra de Rosemary Clooney y música de Bronislaw Kaper)
John Coltrane Quintet - Invitation (1958)
Wilbur Harden (trumpet), John Coltrane (tenor sax), Red Garland (piano), Paul Chambers (bass), Jimmy Cobb (drums)
from the album 'STANDARD COLTRANE' (Prestige Records)
Wilbur Harden (trumpet), John Coltrane (tenor sax), Red Garland (piano), Paul Chambers (bass), Jimmy Cobb (drums)
from the album 'STANDARD COLTRANE' (Prestige Records)
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sábado, 8 de abril de 2017
Caravan - In the Land of Grey and Pink
Aquí, otro tema del mismo disco de Caravan, Winter Wine, en dos versiones: la del álbum, In the Land of Grey and Pink (1971), y otra en directo.
Eugene de Blaas - Carta de amor
Eugene de Blaas (1843 - 1932), pintor italiano de ascendencia austriaca.
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viernes, 7 de abril de 2017
Du Pré y Barenboim - Brahms's Cello Sonata op.99 - 2nd Mvt.
Hace tiempo pudimos escuchar el primer movimiento de esta Sonata de Brahms a Rostropovich y a Richter.
Aquí, el segundo movimiento: Adagio affettuoso.
Aquí, el segundo movimiento: Adagio affettuoso.
Antonio Gamoneda - Mi manera de amarte es sencilla
MI MANERA DE AMARTE ES SENCILLA
Mi manera de amarte es sencilla:
te aprieto a mí
como si hubiera un poco de justicia en mi corazón
y yo te la pudiese dar con el cuerpo.
Cuando revuelvo tus cabellos
algo hermoso se forma entre mis manos.
Y casi no sé más. Yo sólo aspiro
a estar contigo en paz y a estar en paz
con un deber desconocido
que a veces pesa también en mi corazón.
Antonio Gamoneda
Mi manera de amarte es sencilla:
te aprieto a mí
como si hubiera un poco de justicia en mi corazón
y yo te la pudiese dar con el cuerpo.
Cuando revuelvo tus cabellos
algo hermoso se forma entre mis manos.
Y casi no sé más. Yo sólo aspiro
a estar contigo en paz y a estar en paz
con un deber desconocido
que a veces pesa también en mi corazón.
Antonio Gamoneda
(Fotografía de Gabor Seres - Flickr)
jueves, 6 de abril de 2017
miércoles, 5 de abril de 2017
Lawrence Ferlinghetti - "Era una cara que la oscuridad podía matar en un instante..."
Era una cara que la oscuridad podía matar en un instante
una cara tan fácilmente herida
por la risa o la luz
"Nosotros pensamos distinto de noche"
me dijo ella una vez
echándose hacia atrás con languidez
Y citaba a Cocteau
"Siento que hay un ángel en mí", decía
"al cual escandalizo constantemente"
Luego se sonreía y miraba a lo lejos
me encendía un cigarrillo
suspiraba y se paraba
y estiraba
su dulce anatomía
dejaba caer una media
Lawrence Ferlinghetti
(Traducción: Elvio Gandolfo)
(Fuente: La biblioteca de Marcelo Leites)
It was a face which darkness could kill
in an instant
a face as easily hurt
by laughter or light
'We think differently at night'
she told me once
lying back languidly
And she would quote Cocteau
'I feel there is an angel in me' she'd say
'whom I am constantly shocking'
Then she would smile and look away
light a cigarette for me
sigh and rise
( )
and stretch
her sweet anatomy
let fall a stocking
(Fotografía de Richard Brocken - Flickr)
una cara tan fácilmente herida
por la risa o la luz
"Nosotros pensamos distinto de noche"
me dijo ella una vez
echándose hacia atrás con languidez
Y citaba a Cocteau
"Siento que hay un ángel en mí", decía
"al cual escandalizo constantemente"
Luego se sonreía y miraba a lo lejos
me encendía un cigarrillo
suspiraba y se paraba
y estiraba
su dulce anatomía
dejaba caer una media
Lawrence Ferlinghetti
(Traducción: Elvio Gandolfo)
(Fuente: La biblioteca de Marcelo Leites)
It was a face which darkness could kill
in an instant
a face as easily hurt
by laughter or light
'We think differently at night'
she told me once
lying back languidly
And she would quote Cocteau
'I feel there is an angel in me' she'd say
'whom I am constantly shocking'
Then she would smile and look away
light a cigarette for me
sigh and rise
( )
and stretch
her sweet anatomy
let fall a stocking
(Fotografía de Richard Brocken - Flickr)
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Literatura norteamericana,
Verso
martes, 4 de abril de 2017
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